martes, julio 9

Solo se vive una vez 12.

Solo se vive una vez

Capitulo 12.

Me he estado comiendo la cabeza sobre como seguir la novela. He estado preguntando por ahí si querían que Alex muriese o no. ¿Mi decisión?  Leed y el capitulo y lo averiguaréis.

Mierda, mierda, mierda. Un montón de gente se agolpa formando un corro. Le doy golpes desesperados para que despierte.

- ¡Llamad a una ambulancia joder! - grito con lagrimas en los ojos.

Adriana coge el móvil y habla nerviosa. Unos cuantos se van corriendo, no quieren saber nada. Cobardes es lo que son.

- Por favor, respira - susurro mientras presiono su pecho - Alex por favor, no me hagas llorar.

Intento hacerle el boca a boca, pero no se mucho sobre ese tipo de cosas. Alguien me pega un empujón separándome de el. La ambulancia había llegado y no me había dado cuenta.

Solo quedábamos en el jardín Adriana, su hermano, Mike, Victoria y yo. Los demás se habían marchado. ¿Por que? ¿Por que dejarnos solos con el marrón?

- Disculpe señorita - dice alguien apoyando su mano en mi hombro. - ¿Conocía usted al fallecido?
- ¿Fallecido? - pregunto parpadeando intentando no llorar - ¿Ha muerto?
- Muerto - susurra a mi lado Adriana.

No se que hacer. No siento nada. No siento dolor, ni pena. No siento nada. Solo impotencia. Caigo al suelo de rodillas. Sabía que todo esto era una terrible idea. Lo dije, lo dije y no me escucharon. Me gusta tener la razón, pero esta vez no.

Adriana cae al suelo conmigo y me abraza Ella llora en mi hombro. Murmura palabras entre ellas. Culpa. Cree que ha sido su culpa, no se lo perdonará.

- No es tu culpa - le susurro al oído mientras le acaricio la cabeza, cosa que la hace llorar más.
- Soy - hipa - Soy una mierda.

Le agarro la cara con mis dos manos, aún tiradas en el frío y húmedo suelo de cemento, busco sus azules ojos llorosos.

- No eres una mierda. ¿Entendido?
- Entendido - me abraza.
- Chicos - digo bien alto para que me oigan y me levanto del suelo. - Quedaros a dormir en mi casa, estoy sola.
- Será lo mejor,  nadie esta en condiciones para hacer ningún viaje. - comenta Mike.

Todos asienten, coinciden con Mike.

- Sofía ¿Conoces al fallecido? - pregunta una inconfundible voz grave y serena.
- No, agente Ruiz. - dice firmemente Mike sin levantar la cabeza.
- Llevas viviendo en mi casa seis meses y sigues llamándome por el apellido. - dice con una triste sonrisa en los labios.

Me abrazo a el. Por eso se fueron todos, porque llegó la maldita policía. Le cuento todo, siempre he tenido una gran confianza en el. Le cuento desde cómo lo conocí, hasta como murió. Cuando termino me abraza fuerte y me suelta.

- Hoy se quedarán todos a dormir en mi casa - digo y el asiente dando permiso a Mike.

Nadie tiene ganas de hablar. Seguro que hoy llamarán a sus padres. Solo de imaginarlo se me rompe el corazón.  Lloros, gritos y cómo yo, impotencia. Ellos no pueden hacer nada para salvar a su hijo. No pudieron decirle adiós, eso es lo que más duele. No haber tenido unas últimas palabras con el.

Levanto a Adriana del suelo y cogida de su mano marcho hacia mi casa y detrás mío como si se tratase de una procesión todos me siguen, en silencio. No un silencio incómodo,  sino el silencio que más me gusta, un silencio que sirve para pensar.




domingo, julio 7

Solo se vive una vez 11.

Solo se vive una vez.

Capitulo 11.

Como el capitulo anterior Ha sido algo corto. Sigo escribiendo. Aunque sin acostumbrarse. Espero que hos guste.


Adriana sale del baño. Simplemente se ha hecho la raya para resaltar sus preciosos ojos azules. Y empieza a maquillarme a mi. Raya azul, fina capa de colorete y listo. 

- Canta algo - dice poniendo cara de ¿cachorrito? Sea lo que sea me hace mucha gracia.
- Claro - le sonrío.

Cojo la preciosa guitarra de mi padre. Esa guitarra tan especial. Especial porque de pequeña escribí un mensaje especial en el. 'Cada una de las notas que toques, tócalas con el corazón.' Mi padre siempre decía eso, así que un día lo escribí. 

Empiezo a cantar y ella me sigue, las dos cantando  unísono.

Standing in the hall of fame 
And the world's gonna know your name 
Cause you burn with the brightest flame 
And the world's gonna know your name 
And you'll be on the walls of the hall of fame 

You could go the distance 
You could run the mile 
You could walk straight through hell with a smile 


Sonamos bastante bien. 

- No quiero parecer arrogante, pero sonamos bastante bien - digo sonriente.
- Dirás que tu suenas bien - se queja con una triste sonrisa.
- Sonamos bien, juntas.
 
Cojo mi cámara de fotos. Un reflex, una canon, para ser exactos. Y le saco una foto a la chica Timblr gritando '¡Despree!'

Ella sonríe y me quita la cámara.  Nos haces fotos con todas las muecas posibles.

- ¡Ahora una levantando las cejas! - exclama Adriana.

Ahí empezaron las risas, en vez de levantar las dos cejas hago una mueca de lo más extraña.  Nos reímos,  mucho. 
Cuando una paraba de reír la otra comenzaba. 

Seguimos riéndonos y haciéndonos fotos hasta que un frenazo nos interrumpe. Subo las persianas y veo un deportivo negro. El deportivo de Simón. Solo lo usa para fardar, todo el mundo sabe que vive en esta misma urbanización. 

- Chica Tumblr, los invitados están llegando.
- ¿Chica Tumblr? - pregunta mientras deja la cámara sobre mi escritorio. 
- Tu nuevo mote.

Bajamos riendo. Esta si que es Adriana. Llegamos algo tarde, la fiesta debió empezar hace media hora aproximadamente porque ya se ve a gente vomitando en el jardín.

- BUH - grita alguien tapándome los ojos. 
- Victoria, se que eres tu.
- ¿Como lo has sabido? - dice moviendo mucho los brazos, sin la fluidez de todos los días. 
- ¿Ya has bebido? ¿Tan pronto? - pregunto preocupada. Victoria tiene problemas con el alcohol.

Sin responderme se va con unos chicos a los que o había visto en mi vida. Ruedo los ojos y entro a la casa.

El olor dulzón del alcohol derramado por el suelo y el olor amargo y fétido a vómito inundan mi nariz. De momento es un desfase, ya veremos si llega a apocalíptico. 

Sandra, mi ex-mejor amiga me mira con asco dada de la mano de Simón.

- Si hubiese sabido que tal escoria había sido invitada, no habría venido. - dice lo suficientemente alto para que lo oiga.
- Tienes dos piernas y si no me equivoco funcionan. - le susurro al oído- Asi que puedes irte -esto último lo digo más alto.

Me voy, taconeando, bien fuerte, hacia donde están las bebidas.

- Ese odio que te tiene Sandra ¿a que viene? - me pregunta una voz. Una voz que reconozco enseguida.
- No lo se. - digo girándome y quedándome a pocos centímetros de la cara de Iván. - Simplemente me odia.
- ¿Como tu a mi? - pregunta mirándome a los ojos.
- No es que  odie - me alejo de el. - Simplemente, no me gustas.

Iván ríe,  el también ha debido beber porque al instante vomita. Ya sabia yo que servir alcohol en la fiesta iba a ser catastrófico. 

- El baño está en ese pasillo - digo indicando el lugar.- primera puerta a la derecha.

Sin decir palabra palabra se va. Me sirvo un vaso de Coca-Cola y cojo un bote de Pringles olvidado. Satisfecha con mi botín me dirijo al baño.

La puerta del baño está abierta y me apoyo en el marco de la puerta. Agito el bote para que Iván, que está apoyado en el váter,  se percate de mi presencia.

Le doy el vaso y el bote, no sin antes coger seis patatas y salgo del baño en el cual, por el olor, intuyo que han pasado muchas personas.
 
Me encuentro con Mike, al menos el no huele a alcohol. No debe haber bebido. Seguramente se ocupará de llevar a Vitoria a su casa.

- Hola - me saluda sonriente.
- ¿Que hay Mike?
- Disfrutando de la fiesta - dice mas dudoso que afirmando.
- ¿Vienes a la piscina? - le pregunto.
 
Me agarra del brazo y vamos  la piscina coordinando nuestros pasos. Llegamos a la piscina y nos sentamos en una tumbona.

- ¿Conoces al dueño de la casa?
- ¿Como no lo voy a conocer? Es mi vecino- le digo sacando a lengua. 
- Era vidente - susurra - ¿Quien es?
- A ver... - miro a los lados y lo veo en bañador en la parte opuesta a la piscina en la que estamos hablando con unos chicos. - Ese de ahi - lo señalo con el dedo.
- ¿El que que viene hacia aquí? 

Miro al frente, me ha debido ver señalarlo.

- ¡Hey princesa! ¿Quien es ese? - pregunta al fijarse en Mike.
- Ese, es Mike - respondo con una tranquilidad alarmante. Apesta a alcohol.
- Pues deja a Mike y ven a nadar conmigo -  dice tambaleante.

Sin dejar que le responda me agarra de la cintura y me sube a sus hombros como si ese un saco de patatas. Le pego puñetazos en la espalda que el no parece sentir.

- Alejandro, sueltame. - le grito - Te juro por Dios que como me moje te mato.

El estaba demasiado borracho cómo para escucharme. Resbala y caemos los dos a la piscina. Yo subo enseguida a la superficie, pero Alejandro no emerge del agua. Busco a todos lados y no lo veo. 

- Se esta ahogando - grita alguien.
 
Me sumerjo bajo el agua, lo encuentro y lo agarro. Lo llevo hacia el bordillo y compruebo si respira. No lo hace. No respira. 

- Alex - le grito mientras le pego bofetadas- Por el mor  Dios, responde.

 





Solo se vive una vez 10.

Solo se vive una vez.

Capitulo 10.

Aunque nadie la lea, aquí sigo escribiendo la maldita novela. Me he quedado sin ideas, tengo como me suele decir mi hermana, la imaginación en bancarrota,  osea, que si tenéis alguna idea para la novela decírmelo por tuenti o por aquí mismo.


Suspiro y vuelvo a suspirar. Este asunto de la fiesta me trae de cabeza. Es una malísima idea y seguro que le traerá problemas a  Alejandro. 

Además en la fiesta habrá gente que no conozco de nada, amigos de Adriana. Pero lo que mas me preocupa es que aparecerán los populares ricachones, y eso no me gusta ni un pelo. 

- ¿Están preparadas las bebidas? - pregunta alguien en un susurro que me provoca un escalofrío. 
- Creo -digo dudosa- que con tres botellas de dos litros de Coca-Cola y dos de 7up que habían en mi despensa es suficiente.
- Mejor que sobre, antes de que falte - comenta la chica Tumblr.
- ¿Y el alcohol? -pregunta Alejandro 

No se que se espera este chaval. Pretende montar una fiesta en unas horas, llena de adolescentes con las hormonas disparadas, sin el permiso de sus padres y además con alcohol. Como diría Simón, sería un desfase. Pero desfase tipo apocalipsis.

- Ya me encargo yo del alcohol -se ofrece Adriana, cosa que me hace intentar elevar sin éxito las cejas.
- ¿Vas a estornudar? -me pregunta Alejandro. Me debió ver intentando hacer el gesto.

Me sonrojo y niego rápidamente la cabeza causándome un leve mareo. He debido haber puesto una cara extraña. El me sonríe. Sonríe con la boca, no con los ojos. Es una sonrisa falsa. ¿Por que sonríe tan falsamente? 

- Tengo que ir a mi casa por la ropa para la fiesta - dice apenada Adriana. - Está bastante lejos, así que tendré que irme ya.
- No hace falta - la intento convencer - Tengo muchos vestidos, nunca me los suelo poner. Pero ahí están.
- ¡Genial! - exclama dando saltitos y aplaudiendo exageradamente rápido. 

Adriana cada vez me está sorprendiendo más, nunca me la imaginé así. Pensaba que era más seria. Puede que el hecho de que Alejandro esté aquí la cambia.

  Terminamos organizar la fiesta. Aparecen sobre la mesa bebidas alcohólicas, no se de donde han salido y Alejandro bajo del segundo piso un portátil y dos altavoces. Creo que ya esta todo perfecto asi que voy a mi casa seguida de Adriana.

Entramos en casa y nos separamos. La chica Tumblr sube a mi habitación y yo me dirijo a la cocina para pedirle a mi madre si puedo ir a la fiesta.

Tras un largo interrogatorio, en el que varias veces tuve que mentir, con preguntas cómo: ¿Quien la organiza? ¿Donde es? ¿Habrá alcohol? ¿Tiene permiso para usar la casa?

A mi madre no parece preocuparle que un montón de adolescentes salidos estén de fiesta en la casa de al lado.

- Mamá ¿tienes algo que decirme? - le pregunto. - No te preocupa para nada  que haya una fiesta en casa de los vecinos.
- Voy - responde nerviosa -. Voy con tu hermano al centro de desintoxicación no volveremos hasta dentro de tres días. 
- ¿Cuando esperabas decirme que hos ibais y me dejabais sola? - digo manteniendo una calma alarmante.
- Pense que te alegrarías a estar unos dias sola - interviene Marcos.

No ne puedo enfadar. Es el sueño de todo adolescente. Estar solo en casa sin vigilancia. Los sonrío y subo a la habitación,  donde está esperándome Adriana sentada en  cama. 

Cierro las persianas y enciendo la luz. No quiero que Alejandro nos vea cambiarnos.

Abro mi armario y dejo que elija lo que quiera ponerse. Ella mira boquiabierta mi gran armario y recorre con la mirada todas las prendas. Al final se decanta por un vestido cortisimo que yo no me pondría en mi vida. 

Mientras ella se cambia elijo un vestido sencillo, algo corto y para mi gusto precioso. Una vez cambiadas corro a el vestidor de mi madre, que esta lleno de zapatos de tacón. Para mi con los mas unos botines y para mi amiga los zapatos con el tacón mas alto que encuentro. 

- Son perfectos -. Susurra Adriana. Las unicas palabras que ha pronunciado desde que llegué de hablar con mi madre.

Perfectos, como ella. 
Adriana entra a baño al baño a maquillarse. Una vez cerrada la puerta suspiro. Nunca me imagine a Adriana, la chica que fuma en frente del Instituto,  como una chica tan coqueta. Jamás.

Esta fiesta me sigue pareciendo una pésima idea. 




viernes, julio 5

Solo se vive una vez 9.

Solo se vive una vez.

Capitulo 9.

Noveno capitulo aun y yo ya me he quedado sin inspiración. ¿Donde estará mi musa? Este capitulo es un tanto mediocre, lo se. Pero ya no tengo ganas de escribir. ¿Que se le va a hacer? Espero que no sangréis por los ojos.


Me muerdo los labios por no morderme las uñas. ¿Cuándo llegará? Subo las persianas, odio la luz artificial.  Oigo que tocan el timbre y a su vez un '¡Hey! Princesa! Marcos. Pongo los ojos en blanco y bajo las escaleras en tiempo record.
Interrumpo la conversación entre Adriana y Marcos con un grito.

- Hola Rebelde -. Me saluda Adriana.

Le saludo con una sonrisa y la llevo hacia mi habitación.
Adriana es el tipo de Marcos. Alta, delgada y unos ojazos azules que matan. También el pelo, ese pelo negro azabache que le llega hasta media espalda con un lado rapado. Es muy guapa, podríamos llamarla chica Tumblr. La llamaré así a partir de ahora. Me sonrío a mi misma por su nuevo mote.
Entramos juntas a la habitación.

- Como se nota que es un barrio pijo-. Susurra.

Yo también lo llamo así, tenemos mucho en común y eso me encanta.
Nos tiramos cuarenta y cinco largos minutos dando clases. Llevo sin atender en geografía desde primaria. Aunque no lo haya dicho creo que Adriana se avergüenza de mí.
Empezamos con los puntos cardinales, lo único que me sabía. Después llegaron los paralelos y los meridianos y ahí nos quedamos atascadas. Cuando ya se me está quedando el pesado de Alex me desconcentra.
Ese 'buenos días princesa' me está empezando a joder.

- ¿Quien esa preciosidad que te acompaña? -pregunta con una sonrisa seductora.

Ante tal comentario pongo los ojos en blanco y espero a que Adriana me imite.
Pero me llevo una desilusión, le esta sonriendo.

- Adriana, encantada - responde ella sonriente muy a mi pesar.
- Enchanté - hace una reverencia- m'apelle Alex.

Por el amor de Dios. El muy...el. Tiene una pronunciación perfecta.

- Hay, una fiesta en mi casa -comienza manteniendo la sonrisa.- Iba a invitar a Sofía, tu también estas invitado.

Yo me mantengo callada, no creo que me dejen ir.

- Podríais celebrar la fiesta en mi casa - Propone Alejandro.- No conozco mucho la ciudad y me perdería yendo hasta alli.
- ¿No es muy precipitado? Sería mucho trabajo- comienzo a decir.
- Solo habría que hacer unas cuantas llamadas -me interrumpe Adriana.

La que se va a montar. Nuestras casas estan algo alejadas de las demás. Somos unas cuatro casas en esta calle y el resto de la urbanización se extiende más lejos. Parece hecho a propósito.
Esos dos siguen hablando. Adriana me cae bien, y ahora, está con Alejandro. La verdad es que pegan. Chica Tumblr y niño pijo.
No se de que hablaran, pero, no tengo ni ganas, ni interés en meterme en la conversación asi que cojo la guitarra y empiezo a tocar unos acordes, y como siempre, acabo cantando una canción.  Asleep otra vez.
Oigo unos lentos aplausos y levanto la cabeza. Desde una silla del escritorio Me mira atónita Adriana y desde su ventana me aplaude un impresionado Alejandro.

- Ya que hemos quedado, organizaremos la fiesta junto con Adriana. -Explica Álex
- De acuerdo - digo asistiendo.
- ¡Venid ya! - grita el muchacho.

Me pongo is vans y ya. Bajamos las escaleras y nos vamos, no sin antes despedirnos de Marcos y mi madre.
No nos hace falta caminar mucho, la casa nos queda al lado.
Adriana tendrá que llamar para avisar del cambio del lugar. Alex se encargará de preparar la casa a prueba de adolescentes y yo de la comida y la bebida. Tenemos desde las once hasta las ocho de la tarde para repararlo todo.

- Alejandro -. Empiezo insegura-. ¿Tus padres te dejan montar una fiesta?
- Mi padres me dejarán - dice seco.- Estan de viaje, siempre lo están.  No les importará.

Alejandro será egocéntrico,  pero lo pasa mal. Prácticamente vive solo con su hermana Alba. Esta es la primera fiesta que monto, debería estar emocionada, pero no. No puedo evitar pensar que algo saldrá mal. Es una casa enorme con piscina, tiene que acabar mal por cojones.
Desde que hemos llegado aquí, hemos estado los tres solos. Ni Alba, ni los padres de Alejandro están.







sábado, junio 29

AVISO.

Como estoy escribiendo otra novela www.tuyosiendofelicespiensalo.blogspot.com Asi que pueda que suba menos capitulos, y eso que subo pocos ahora. Solo era para esto y ya que estoy aqui para deciros que si me denuncian por tuenti avisaré por aqui como me llamo.

GRACIAS POR LEER

jueves, junio 27

Solo se vive una vez 8.

Solo se vive una vez

Capitulo 8

Las visitas ya están subiendo, cosa que ne encanta. También están empezando a aparecer, cosa que adoro y encima me dan consejos. Muchas gracias a tod@s. Hos adoro. Siento esta mierda de capitulo, no tengo ganas de escribir.

I'm gonna pop some tags
Only got twenty dollars in my pocket 
I'm, I'm, I'm hunting, looking for a come up
This is fucking awesome

Now walk into the club like 
"What up? I got a big cock!"
Nah, I'm just pumped
I bought some shit...

Le pego golpes a la mesita auxiliar hasta que encuentro el despertador. ¿Pero que cojones? No entiendo, odio esta canción. El único que me cambia la melodía de la alarma es Marcos, mi hermano. Pero el esta en el centro de desintoxicación.
Aun estoy demasiado cansada para pensar.

- Buenos dias princesa- oigo decir a alguien.

Casi se me olvidaba. Alejandro. Antes me quejaba de que me sentía observaba. Ahora si que lo estoy de verdad. Pero, un momento. La persiana está bajada ¿como puede saber que estoy despierta?
Dos manos me agarran de la cintura y me tiran a la cama. Unos preciosos ojos marrones me miran divertidos. Marcos.

- He dicho...Buenos días princesa -me reprocha.

Yo le sonrío, hace bastante que no lo veía.

-Buenos días princeso.
- Mamá dijo que te despertara- comienza.- Me ha dicho que te tienen que dar clases y que tienes una cita.

Esto ultimo lo dice con una sonrisa picarona en el rostro. En otra ocasión le habría borrado la sonrisa con una suave torta, pero hace tanto tiempo que no lo veo, que no puedo resistir darle un abrazo.
El sigue igual. Igual de alto que siempre, con ese pelo rubio revuelto y despeinado. Hasta al tacto se siente igual, no tiene ni pelusilla.
No se por que pero necesitaba comprobarlo.

- Humo de aquí- le echo de mi habitación.- Tengo que cambiarme.

Se va de mi habitación con cara divertida. Sigo sin subir la persiana. No vaya a ser que Alejandro esté mirando. Pervertido.

Me ducho y me pongo unos leggins negros y mi sudadera de Oxford, que no falte y unas zapatillas para andar por casa.
Subo las persianas y gracias a dios Alejandro no esta mirando.
Mis labios forman una sonrisa pícara,  Marcos me las va a pagar por cambiarme la alarma.
Bajo lo más sigilosa posible. No se que le voy a hacer. Improvisare algo. Le saltaré encima o algo parecido.

- BUH- me gritan al oido.
-Imbécil- digo pegando un bote. - Me las vas  pagar.

Entro corriendo a la cocina seguida de Marcos y el muy torpe  cae. Por listo. Le sonrío burlona.
Somos tal para cual. Igual de torpes y con el mismo gusto hacia la música.
Le doy la mano para que se levante y me tira al suelo y sale corriendo.
Yo me quedo ahí tirada. Desde que murió mi padre nunca me lo habia asado tan bien. El si que me puede sacar una de mis sonrisas, de esas que están en peligro de extinción.

- Se que tienes mucho sueño - se ríe mi madre- pero dentro de diez minutos tienes clase.

Ostia es verdad. Cojo una manzana  y subo corriendo a mi habitación.
Dios que nervios.

- ¡Hey princesa! - exclama alguien.
- Marcos,  no seas petardo- empiezo a decir.

Uno momento, esa no es la voz de Marcos. Esta es mas arrogante. Mierda. Alejandro.

- ¿Marcos? ¿Tan rápido me reemplazas?
- Debe ser que si- dicho esto corro las cortinas.
Ya me lo imagino con su asquerosa sonrisa de suficiencia. Que asco le tengo. Además hoy tengo que ir a su casa. Podría fingir que me encuentro mal. Pero seguro que mamá me obligará a ir para 'no hacerle el feo' a la familia. JA. Mentira. Intentan casarnos. Lo presiento. Además es lo último que necesito, enamorarme.
Ya lo pasé mal con mi ex-novio. Adivina. El fue uno de mis matrimonios concertados que acabaron en divorcio. Solo que corté yo con el. No por un atleta, que va. Sino porque es asqueroso.
El y unos compinches suyos le hacían bullyng a uno de mis mejores amigos. ¿por que? Por eso mismo. Porque pasa pasaba mucho tiempo conmigo.
Ahora no está a mi lado. Se mudó. Justo cuando mas lo necesito se va, se que  soy egoísta,  pero lo necesito.









domingo, junio 23

Solo se vive una vez 7.

Solo se vive una vez

Capítulo 7.

Ya lo se, dije que subiría el capitulo ayer, una hora más, una hora menos. Pero me acabo de acordar de que tenia el sexto capi preparado así que para cuando lo he subido ya eran las once y muchisisisimo. ¿Que pasa? Soy un mar de despistes, eso es lo que pasa. Así que me voy a sacrificar y escribiré esto aunque se que nadie lo va a leer.


Grito frustrada. ¿Por que ha tenido que ser mi vecino tal elemento? Encima de mi edad. Mi madre no parará de presionarme hasta que salga con el. Siempre pasa lo mismo. El pijo me pide salir, digo que si por la presión, salimos unos meses y cuando le cojo cariño ¡Zas! Rompe conmigo y se va con alguna de las animadoras. Siempre igual.
Oigo un grito, debe ser mi madre llamándome. Habrán llegado los vecinos.  Mi pesadilla empieza en tres.....dos.....
Empiezo a bajar por las escaleras y me encuentro a mi madre mirandome con cara de desaprobación. 
-Uno -. Susurro.
- ¿Decías? -pregunta mi madre.
- Nada -. Le respondo sonriente.

Los vecinos empiezan a entrar. El padre y la madre; los dos con el pelo negro azabache, la madre de ojos azules y el padre marrones. La siguiente en pasar es una chica que aparentaba la misma edad que yo, pelo rubio ceniza y unos ojos algo extraños eran marrones con puntitos verdes y azules, eran preciosos. El siguiente en entrar es el muchacho de la ventana, que cierra la puerta a su paso.
 Lo que yo decía una familia feliz. Padre, madre e hijos y uno de ellos varón y de mi edad. A L E L U Y A . Que asco por favor.
Hacemos una presentación rápida.La madre se llama Natalia, el padre Sebastián y los hijos Alba y Alejandro.
Alba y Alejandro deben ser mellizos, porque aparentan la misma edad. Me extraña que aun pareciéndose en tantas cosas a sus padres tengan diferente color de pelo. Es que hay una gran diferencia entre negro y rubio ceniza, pero bueno.
Le doy dos besos a cada uno, incluso a Alejandro resistiendo las ganas de echar mi primera papilla.
Nos sentamos todos menos mi madre y Natalia en la mesa del jardín, ya que en la de la cocina estaríamos algo apretados. 

- Seguro que ya estarán concertando nuestro matrimonio- bufa Alex.

Una risa involuntaria sale entre mis labios. Mierda. Una sonrisa de suficiencia aparece en la boca de Alejandro. 

- Que bien huele -. Comenta Alba.

Tiene razón huele genial. Mi madre ha hecho su famosa lasaña de ternera. También ha preparado su deliciosa ensalada y magret de pato. Una cena deliciosa. Estoy deseando incarle el
diente. 
Esperamos a que las madres se sienten  y comenzamos a comer. Los padres empiezan a hablar sobre economía, asi que desconecto.

- Bueno ¿sois mellizos? - pregunto para romper el hielo.
- Asi es -. Me responde Alba.- ¿Tu tienes algún hermano?
- Si -. Digo secamente.
- ¿Donde está?  - pregunta Alejandro.
- Alejandro - Susurra Alba-. Recuerda lo que dijo mamá.

Alejandro se calla. Mamá debió contarle a la vecina lo de el accidente.

- ¿ A que instituto vais?  - cambio de tema.
- A ninguno, como la semana que viene dan las vacaciones...

Que suerte, yo aun taniendo que soportar las asquerosas clases de Daniel y ellos con vacaciones anticipadas. No se de que hablamos, hasta que empezamos a hablar de música,  mi tema preferido. El bocazas de Alejandro  empieza a contar que nos conocimos antes, que me oyó cantar y que tengo una voz preciosa. Resulta que a el tambien le gusta. Lo que mi madre estaba deseando, que tengamos algo en común. No se como, pero ahora tengo una cita con ese petardo. Después de las ansiadas clases con Adriana tengo que ir a la casa de los vecinos a ver los instrumentis que tiene Alejandro. Que bien, que se note la puñetera ironia por favor.