domingo, junio 23

Solo se vive una vez 7.

Solo se vive una vez

Capítulo 7.

Ya lo se, dije que subiría el capitulo ayer, una hora más, una hora menos. Pero me acabo de acordar de que tenia el sexto capi preparado así que para cuando lo he subido ya eran las once y muchisisisimo. ¿Que pasa? Soy un mar de despistes, eso es lo que pasa. Así que me voy a sacrificar y escribiré esto aunque se que nadie lo va a leer.


Grito frustrada. ¿Por que ha tenido que ser mi vecino tal elemento? Encima de mi edad. Mi madre no parará de presionarme hasta que salga con el. Siempre pasa lo mismo. El pijo me pide salir, digo que si por la presión, salimos unos meses y cuando le cojo cariño ¡Zas! Rompe conmigo y se va con alguna de las animadoras. Siempre igual.
Oigo un grito, debe ser mi madre llamándome. Habrán llegado los vecinos.  Mi pesadilla empieza en tres.....dos.....
Empiezo a bajar por las escaleras y me encuentro a mi madre mirandome con cara de desaprobación. 
-Uno -. Susurro.
- ¿Decías? -pregunta mi madre.
- Nada -. Le respondo sonriente.

Los vecinos empiezan a entrar. El padre y la madre; los dos con el pelo negro azabache, la madre de ojos azules y el padre marrones. La siguiente en pasar es una chica que aparentaba la misma edad que yo, pelo rubio ceniza y unos ojos algo extraños eran marrones con puntitos verdes y azules, eran preciosos. El siguiente en entrar es el muchacho de la ventana, que cierra la puerta a su paso.
 Lo que yo decía una familia feliz. Padre, madre e hijos y uno de ellos varón y de mi edad. A L E L U Y A . Que asco por favor.
Hacemos una presentación rápida.La madre se llama Natalia, el padre Sebastián y los hijos Alba y Alejandro.
Alba y Alejandro deben ser mellizos, porque aparentan la misma edad. Me extraña que aun pareciéndose en tantas cosas a sus padres tengan diferente color de pelo. Es que hay una gran diferencia entre negro y rubio ceniza, pero bueno.
Le doy dos besos a cada uno, incluso a Alejandro resistiendo las ganas de echar mi primera papilla.
Nos sentamos todos menos mi madre y Natalia en la mesa del jardín, ya que en la de la cocina estaríamos algo apretados. 

- Seguro que ya estarán concertando nuestro matrimonio- bufa Alex.

Una risa involuntaria sale entre mis labios. Mierda. Una sonrisa de suficiencia aparece en la boca de Alejandro. 

- Que bien huele -. Comenta Alba.

Tiene razón huele genial. Mi madre ha hecho su famosa lasaña de ternera. También ha preparado su deliciosa ensalada y magret de pato. Una cena deliciosa. Estoy deseando incarle el
diente. 
Esperamos a que las madres se sienten  y comenzamos a comer. Los padres empiezan a hablar sobre economía, asi que desconecto.

- Bueno ¿sois mellizos? - pregunto para romper el hielo.
- Asi es -. Me responde Alba.- ¿Tu tienes algún hermano?
- Si -. Digo secamente.
- ¿Donde está?  - pregunta Alejandro.
- Alejandro - Susurra Alba-. Recuerda lo que dijo mamá.

Alejandro se calla. Mamá debió contarle a la vecina lo de el accidente.

- ¿ A que instituto vais?  - cambio de tema.
- A ninguno, como la semana que viene dan las vacaciones...

Que suerte, yo aun taniendo que soportar las asquerosas clases de Daniel y ellos con vacaciones anticipadas. No se de que hablamos, hasta que empezamos a hablar de música,  mi tema preferido. El bocazas de Alejandro  empieza a contar que nos conocimos antes, que me oyó cantar y que tengo una voz preciosa. Resulta que a el tambien le gusta. Lo que mi madre estaba deseando, que tengamos algo en común. No se como, pero ahora tengo una cita con ese petardo. Después de las ansiadas clases con Adriana tengo que ir a la casa de los vecinos a ver los instrumentis que tiene Alejandro. Que bien, que se note la puñetera ironia por favor.



Solo se vive una vez 6.

Solo se vive una vez.

Capitulo 6.

Sexto capitulo ya. Espero que hos guste. Este lo he escrito el dia de mi cumpleaños, ese dia estaba algo plooff por razones familiares. Hoy habrá dos capítulos. El que escribí ayer y el de hoy. Hos quiero lectores/as mios.

Subo a mi habitación. No pienso arreglarme para esos pijos. Con lo de hoy; he perdido toda mi fé en la humanidad. Asi que como acto de rebeldía hacia mi madre, me procuro vestir lo más informal posible; me pongo unos shorts, una basica con una camisa de leñador por encima y unas vans. 
Me quedo en mi habitación. Necesito mi guitarra. Mierda. ¿Por que la he dejado en el aula de música? Imbecil. Sofía, eres imbecil. ¿Ahora que hago? Podría cojer una de las guitarras de mi padre. No. Demasiados recuerdos.
Ni siquiera mi madre usasu antigua habitación. Al tener una casa tan grande teniamos dos habitaciones de sobra. Ahora solo una. La antigua habitación de mis padres ya no se usa. Es como una parte de la familia que eramos. Mis padres, mi hermano y yo.
Desde la muerte de aquel risueño hombre, esa cuerda que nos unia se rompió. Mi madre y yo nos separamos y mi hermano cayó en las drogas, ahora está en un centro de desintoxicación.Aunque el no viviese con nosotros, su ausencia se siente.
Creo que voy por una guitarra a la habitación de mi padre. Prometo no derrumbarme. Esta vez no.
Me planto delante de la antigua habitación de mis padres. Cojo aire, abro la puerta y entro.
Todo sigue igual que el dia del accidente. La cama sin hacer, dos pantalones tirados en el suelo, una  foto de mi padre y yo juntos, sonriendo. Me froto la cara y me doy cuenta de que tengo las mejillas humedas. He estado llorando y no me he dado cuenta. Hay tres preciosas guitarras colgadas en la pared. Las tres electricas. No, yo necesito la otra. La clasica. ¿Donde estará? Recuerda Sofía, recuerda. ¡Ya se! Debajo de la cama. Mi padre siempre la escondia ahi. No queria que se la cojiese. Al recordar eso le sonrío a la nada.
Me agacho y logro vislumbrar el estuche de la guitarra, lo cojo, lo abro y saco de el una preciosa guitarra.
Salgo de la habitación con la guitarra en las manos y le echo una última mirada a el cuarto.
Entro a mi habitación y me tiro en la cama. Empiezo a tocar unas notas aleatorias, hasta que empiezo a cantar una de mis canciones favoritas. Hall of fame.

Standing in the hall of fame 
And the world's gonna know your name 
Cause you burn with the brightest flame 
And the world's gonna know your name 
And you'll be on the walls of the hall of fame 

You could go the distance 
You could run the mile 
You could walk straight through hell with a smile 


- ¡Hey! -suelta alguien llamando mi atención-.tienes una voz preciosa.

Busco la fuente de aquella voz. ¿De donde sale? Solo puede ser de la casa de los vecinos. Me dirijo hacia la ventana abierta y saco la cabeza. Apoyado en el alfeizar de su ventana hay un muchacho rubio y de ojos marrones como los de mi padre. Me quedo embobada mirándolo.

- Se que soy muy guapo- comienza a decir sonriendo.
-No seas estúpido- le interrumpo-. Es que me resultas familiar.
- Seguramente, suelen decirme que me parezco a un ángel. 
- Tienes un ego impresionante- le bufo-. Solo eres un niñato pijo más.
- ¿Perdona? ¿Que me has llamado?- pregunta gracioso. 
- ¿Aparte de ser un niñato pijo? ¿Eres sordo?- dicho eso cierro la ventana lo mas fuerte posible y corro las cortinas.